Como prosiandoDel disco: Estrellero   Venga´hablarle Patrón… Don Jesucristo: 
Soy un gaucho nomás; sol, piedra y cardo; 
y se me hace que y´nora que yo esisto 
pués no sé ni rezar… pa´ no amolarlo. 
 
Vengo de lejos… sabe? 
Y muy transido! 
Si lo he campiao una ponchada di años, 
y a´ura vengo´apriender que un camino 
nomás -el del silencio- pa´ encontrarlo! 
Como no sé rezar… tampoco m´hinco; 
frente a la Cruz del Sur, sombrero en mano 
y de hombre a hombre, como Usté lo quiso, 
m´esplicaré, Patrón 
…como prosiando: 
 
Siempre jui de Su ley; 
de güen instinto; 
di una sola palabra pa´ los tratos; 
lial pa´l cristiano amigo… o enemigo; 
gaucho pa´ tuito el mundo! 
Hasta´el tutano! 
 
…Juí dueño de la tierra. 
Había nacido 
pa´ ganarle al pampero di a caballo; 
como tuitos los rumbos eran míos 
crecí libre y cantor… 
como los pájaros 
 
Viví libre y cantor. 
 
Pero está dicho 
que el bien, ni el mal, pueden durar cien años: 
Mi libertá, Patrón, cayó en peligro 
y pa´ salvarla ensangrenté los pastos. 
 
Me creció un nombre: Patria! 
Un nombre lindo 
como el Suyo, Patrón; 
Projundo, y claro. 
Y lo grité! Y temblaron con mi grito, 
el cerro, el río, el puma y el quebracho! 
 
Pa´llegar´alcanzarla, mi cuchillo 
se trepó a una tacuara; 
y jué tan alto, 
que le cruzó en el pecho al cielo herido 
la franja federal de los ocasos! 
 
Y la patria jué mía. 
Y su cariño 
m´envolvía en un sueño… azul y blanco, 
cuando "por ella" apechugaba el frío, 
despanzurrao y solo entre los pastos. 
 
Después… 
Vaya´saber! 
…Ya jué distinto. 
 
Patrón… Usté y la Patria me olvidaron 
y a´ura se me hacen cortos los caminos 
y el caminar sin fé… se me hace largo. 
 
A´ura soy "gaucho alzao"; 
un perseguido! 
Yo, que acuné la Libertá en mis brazos, 
por defenderla hasta la muerte, vivo 
topando con la ley… 
y el alambrado! 
 
El monte es mi guarida. 
Perseguidos, 
yo y los yaguareteses nos codiamos 
noche a noche en los pasos escondidos 
bebiendo agazapaos en los remansos… 
 
Pero aún soy de los Suyos; 
y es sabido 
que, no faltando el chala ni el amargo, 
se puede morir di hambre el pulguerío 
que no le doy ración, 
ni me lo rasco! 
 
Usté me dio este rumbo, y voy solito 
mezquinándole el cuero a los caranchos; 
no lo viá dejar mal: 
jamás se ha visto 
dispararle a los perros al lión bayo! 
 
Porque… ta´ claro nó? 
Si recebimos 
la vida de Usté mesmo, de Sus Manos, 
el deber es cuidarla; 
cualquier bicho, 
si no es muy ruin, busca morir matando! 
 
…Perdone si lo amolo con la prosa; 
la soledá ocasiones dentra´a´urgarnos 
y es cuestión de volverse medio loco 
sin más ni una compaña qu´el caballo… 
 
Ricién nomás, siguiendo esa picada 
me topé con el cielo a boca´e jarro 
y halle la Cruz… 
pa´ mí que se inclinaba 
como una bendición sobre estos llanos! 
 
Y… algo se me ablandó; 
talvés l´achura 
que llaman corazón… 
pero hace tanto 
que el tiempo me borró las oraciones, 
que le dentré a rezar… como prosiando. 
 
Y aura… 
me voy, Patrón. 
Mientras estribo, 
yo… que todo lo he dao, viá pedirle algo: 
 
Sálveme la guitarra! 
La preciso… 
pa´ estar seguro de morir cantando! 
 
 
Relato por milonga 
Letra y Música: Osiris Rodríguez Castillo                |